San Marino, el pequeño país enclavado en el norte de Italia, conocido en el mundo del fútbol más por sus goleadas recibidas que por victorias, podría convertirse en un protagonista inesperado en las Eliminatorias hacia el Mundial 2026. La idea, a primera vista, suena a broma: un equipo que históricamente ha perdido casi todos sus encuentros podría disputar el repechaje rumbo a la Copa del Mundo y para eso debe ser goleado. La compleja estructura del torneo clasificatorio deja abierta una puerta, y los números aún le sonríen a la Serenissima.
El sistema de la UEFA para 2026 combina las clasificatorias con los resultados de la Nations League, generando escenarios inéditos. En esta edición, los 53 equipos europeos se distribuyen en grupos de cuatro o cinco selecciones. El líder de cada grupo