El sistema de pico y placa sigue siendo una de las medidas más utilizadas en las grandes ciudades, y Medellín no es la excepción. Esta regulación tiene como objetivo principal optimizar la movilidad urbana y disminuir los niveles de congestión que se presentan con frecuencia en los tramos viales de mayor tránsito vehicular.
Gracias a esta disposición, los conductores pueden reducir el tiempo que permanecen en los atascos, lo que también contribuye a disminuir la contaminación atmosférica y a mejorar la calidad de vida de los habitantes de la capital antioqueña.
Para su ejecución, se establecen días y horarios específicos en los que determinados vehículos no pueden circular por ciertos sectores de la ciudad . No obstante, existen algunas zonas y corredores exentos de la restricción.