Por orden del papa León XIV, el Vaticano presidió este lunes un acto de reparación en la Basílica de San Pedro, luego de que un hombre orinara frente al altar mayor el pasado viernes. Se trata del tercer episodio de profanación en menos de un año en uno de los templos más sagrados para el catolicismo, lo que ha llevado al pontífice a endurecer el tono y convocar una ceremonia de purificación antes de que se reanuden las misas sobre la tumba del apóstol Pedro.
El incidente ocurrió cuando un ciudadano de Kosovo logró saltar las barreras que rodean el baldaquino de Bernini e intentó orinar sobre el altar de la Confesión. Los vigilantes del templo intervinieron en cuestión de segundos, evitando que el hombre concretara el acto, aunque su intento fue grabado en video y difundido por medios