Damnificados narran el inicio de la tragedia desde la noche del jueves, asustados por el riesgo de desbordamiento del río Cazones y la alarma que marcó el inicio de un etapa con agua y lodo inundando sus hogares

Poza Rica, Ver.- Al ingresar por la carretera Poza Rica–Cazones, el paisaje comienza a transformarse en una escena desoladora. Vehículos cubiertos de lodo, estacionados a la orilla del camino, anuncian la cercanía del fraccionamiento La Florida, una de las zonas más golpeadas por las inundaciones del pasado 10 de octubre provocadas por la vaguada y la depresión tropical 90E.

Esta comunidad, que ya había sufrido estragos en 1999, jamás imaginó revivir una tragedia de tal magnitud. El agua cubrió por completo viviendas que sus habitantes nunca pensaron que podrían quedar bajo el n

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