Corría el año 2019 cuando Kim Kardashian decidió expandir su imperio más allá del entretenimiento y la belleza. Fue entonces cuando, junto con el empresario Jens Grede, lanzó SKIMS, una innovadora marca de ropa interior, prendas moldeadoras y ropa de descanso. El objetivo era ambicioso: crear una línea inclusiva, cómoda y funcional, diseñada para cuerpos reales y diversos. Con una propuesta que rompía con los rígidos cánones tradicionales del shapewear, SKIMS apostó por la comodidad, la representación y la versatilidad como sus pilares fundamentales .
Desde su debut, SKIMS ha marcado un antes y un después en la industria de la moda íntima. Su éxito se debe en gran parte a su extensa gama de tallas y tonos de piel, un detalle que, aunque básico, había sido históricamente ignorado por otr