Miles de puertorriqueños en varios municipios han vivido cortes de luz por dos días consecutivos, en medio de una aguda crisis energética en la isla. Las autoridades locales reconocen que el sistema se encuentra en estado crítico mientras las facturas del servicio suben de precio constantemente. Entre otras cosas, el problema se debe a una alta dependencia de Puerto Rico de EE.UU., cuyas empresas privadas, según se denuncia, no actúan de acuerdo con los intereses de la población local.