Stephen Miller, tal vez el hombre de mayor confianza del presidente Donald Trump, ha emergido como la figura ideológica clave y más poderosa dentro de la Casa Blanca en esta segunda administración.
Cada mandatario suele tener un consejero predilecto, y en el caso de Trump, ese rol lo cumple Miller, quien ostenta el cargo de subjefe de gabinete y asesor de seguridad nacional en política interna. De hecho, es el único asesor cercano que también lo acompañó durante su primera presidencia. Analistas comparan su influencia con la de figuras como Dick Cheney (el todopoderoso vicepresidente de George W. Bush) debido al control sin precedentes que ejerce sobre las políticas del gobierno.
La muestra más clara de su estatus proviene del propio Trump: consultado en Meet the Press de NBC sobre la po