Juvenal Rodríguez fue uno de los colaboradores más fieles de Miguel Ángel Russo. El ayudante de campo colombiano, que lo acompañó en sus últimos años como entrenador de Boca Juniors, mantuvo una relación muy cercana con el DT, a quien definió como “un maestro de la vida”.
En diálogo con Super Deportivo Radio (Villa Trinidad), Rodríguez relató: “Desde que conocí a Miguel, he disfrutado la vida. Miguel me enseñó a disfrutarla. Se llamaba Miguel Ángel, tenía el ángel hasta en su nombre. Para él, el silencio era una expresión de sabiduría. Con Miguel uno sabía cuándo callar”.
El asistente confesó que durante los últimos días del técnico pensó en cómo sería su partida: “Obviamente lo tenía que pensar en esos días duros, antes de su fallecimiento”.
Rodríguez recordó una de las frases más cara