Siguen los trabajos previos al esperado soterramiento de la ronda este a su paso por el cruce de La Granja. Si a mediados de septiembre se acometía la reparación de una tubería de agua cuyo estado era incompatible con las obras impulsadas por el Ministerio de Transportes, este jueves ha sido la reubicación de un cableado eléctrico lo que ha obligado a cortar el conocido como Camino del Vago. Las obras se adjudicaron en febrero y el contrato se formalizó en marzo con el fin de que comenzasen antes del verano, pero la actuación principal se ha ido demorando. Ha sido la empresa leonesa Oly la encargada de acometer los trabajos previos de este jueves, aunque el soterramiento del cruce fue adjudicado a Copcisa por 23,8 millones de euros. El plazo de ejecución será de tres años. Dicho calendario

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