Caracas.- José Gregorio Hernández Cisneros, el ‘médico de los pobres’, se convertirá el domingo en el primer santo de Venezuela, un país que ya desde hace más de un siglo le profesa una devoción como tal, y cuya canonización ha sido durante años uno de los pocos puntos de unión en medio de la polarización política.
José Gregorio, como la gente comúnmente lo llama, intentó entrar en la vida religiosa en dos ocasiones en sus 54 años de vida, pero, movido por la ciencia y su vocación, terminó curando a los más necesitados. Aún después de su muerte, son innumerables las sanaciones que le son atribuidas, aunque no documentadas formalmente por la Iglesia Católica.
Nacido el 26 de octubre de 1864 en Isnotú, un pequeño poblado del occidental estado Trujillo, y criado por una familia modesta de m