“Todo fue por justicia”. Eso dijo Pablo Rodríguez Laurta a los periodistas que cubrían el traslado que se hacía a Tribunales de Entre Ríos, para su declaración indagatoria.
También dijo: “Hay que venerarlo, es un mártir”, una frase críptica, que parecía otra forma de autojustificación.
Eso mencionó en el traslado, pero frente a la fiscal Daniela Montangie, quien lo citó a declarar por el homicidio de Martín Sebastián Palacios, el conductor de una app que lo iba a trasladar desde Concordia hasta Córdoba, se abstuvo de hacer cualquier declaración, por consejo de su abogado, un asesor letrado oficial, provisto por el Estado.
Una vez confirmada la identidad de los restos que “en un 99%” pertenecen a Palacios, la fiscal tiene que dictar o no la prisión preventiva.
El traslado a Córdoba está