El padre Franklin Manrique, párroco de María Madre del Redentor en Los Naranjos y asesor pastoral familiar de la Arquidiócesis de Caracas, fue capellán del colegio Belén, fundado por la madre Carmen Rendiles, donde aún sigue colaborando con estas hermanas. Este colegio fue clave en el caso de la joven Fabiola , el primer milagro que se le atribuyó a Carmen para ser beata en el año 2018.
Franklin manifestó que estos días previos a la canonización han servido para revivir lo que fue esta experiencia desde la misericordia de Dios. “Justamente el año de la beatificación, que se realizó aquí en Caracas, la familia de esta joven estaba atravesando un momento muy difícil”, explicó en el programa De Primera Mano de Radio Fe y Alegría Noticias .
Fabiola estaba hospitalizada y su mamá cuenta