Las manifestaciones en las principales ciudades y pequeñas concentraciones en todo Estados Unidos para las protestas “No Kings” siguen creciendo en contra del presidente Donald Trump.
Los organizadores señalaron que Trump está liderando un régimen cada vez más militarizado y autoritario, derivado de las redadas masivas del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) y el despliegue de la Guardia Nacional en estados gobernados por demócratas han hecho mucho más intensa la indignación desde las protestas originales de “No Kings” en el mes de junio.
El mandatario y el Partido Republicano han quitado importancia a las manifestaciones, y algunos republicanos las han denominado de antiamericanas.
Asimismo, las protestas se producen en el marco de un cierre del gobierno, con los legisla