Tegucigalpa (Especial Proceso Digital /Por Lilian Bonilla) – El gobierno y el partido Libre se preparan a seis semanas de las elecciones para dejar protegidos a sus miles de militantes que tienen una plaza gubernamental y a la vez que sirvan como una “bomba laboral” incrustada en una nueva administración y que pueda “explotarle” cuando intente regular la gigantesca masa salarial del Estado.
– Entre el discurso y la práctica el gobierno estrena Decreto laboral de conveniencia que según expertos es más política que justicia, mientras realiza despidos que generan más demandas laborales.
Cuesta arriba en las encuestas y sondeos electorales, el partido Libre y el gobierno comenzaron a tomar medidas que les permitan salvaguardar su activo, que son sus militantes leales y que puedan ser uti