La escalada de violencia en el barrio Valle Grande parece no tener freno. Luego del crimen de Emir Barboza, el niño de 7 años asesinado a principio octubre, la Fiscalía confirmó que se multiplican las denuncias cruzadas entre las familias Carrizo y Barboza, dos grupos enfrentados desde hace tiempo y que ahora profundizaron el conflicto.
El fiscal de la UFI Genérica, Alejandro Mattar, a cargo de una de las investigaciones, confirmó en rueda de prensa que no solo se reciben presentaciones en su unidad, sino también en otras dependencias judiciales, lo que refleja la gravedad de la situación. “Efectivamente se están recibiendo denuncias de ambas familias. Lamentablemente, es una situación que supera el ámbito de violencia normal de un barrio. Hay un conflicto que viene desde hace largo tiemp