Las Fuerzas Armadas de España se encuentran inmersas en una renovación de sus servicios y material. Los proyectos y programas se están diversificando tras el aumento en el gasto de defensa por parte del Gobierno, en buena medida para alcanzar lo exigido por los acuerdos de la OTAN. Algo que ahora toma mayor relevancia tras el veto a las empresas israelíes. Entre los grandes beneficiados de este giro en la política de defensa del país se encuentra Indra Group y también Escribano Mechanical & Engineering. Dos compañías que ahora van a empezar a trabajar juntas en el marco del cacareado programa PEM (Programa Especial de Modernización).
En concreto, según han informado fuentes solventes a LA RAZÓN, ambas empresas se encargarán de desarrollar la «Fabricación Avanzada en Movilidad Terrestre So