

CIUDAD DE MÉXICO (AP) — La cantautora venezolana Elena Rose buscó capturar la esencia de su época favorita del año en su álbum debut “Bendito Verano”, en el que el pop, el afrobeat y la música tropical conviven con temas como el amor propio y su conexión espiritual.
Antes de iniciar su carrera como intérprete, Rose había creado éxitos para Daddy Yankee, Rauw Alejandro, Becky G, Selena Gomez y Sebastián Yatra.
Aunque “Bendito Verano” es su álbum debut, su trabajo previo le ha valido cuatro nominaciones al Latin Grammy 2025.
Rose compite en las categorías de álbum del año y mejor álbum pop contemporáneo por su EP “En las nubes - con mis panas”; canción del año por el tema interpretado por Alejandro Sanz “Palmeras en el jardín”, en el que participó como compositora, y mejor interpretación de música electrónica latina por “Orión (Sistek Remix)” con Boza y Sistek. Rose será una de las artistas con números musicales en la ceremonia de premiación que se realizará el 13 de noviembre en Las Vegas.
Al tener tanta experiencia y expectativas, Rose admitió que, en algún punto, el saber que tenía que entregar su primer álbum “se llegó a convertir en una pesadilla”.
“Pero cuando salió ‘Me lo merezco’, eso sirvió como de brújula para darme una dirección muy honesta hacia dónde quería ir”, señaló sobre uno de sus temas más populares. “En realidad todo fluyó bien, se lo entregué a Dios y le pedí ‘por favor, yo sólo quiero hacer algo que sea bonito, que la gente conecte’”.
El álbum transmite esa conexión grande con Dios y una búsqueda de paz en medio del caos.
“Tengo muchos años buscando eso”, dijo la artista. “Es real que cuando tú lo encuentras realmente es sinónimo de tranquilidad y de paz. Es paz en la mente, en el espíritu, en el cuerpo físico. Yo sí quería de alguna otra manera encontrar una versión de mí que pudiese comenzar a atraer algo positivo, realmente y transformador a mis oyentes, y eso ha sido como que el trabajo infinito en el que he estado los últimos años de mi vida”.
Pero a pesar de tener este lado espiritual “Bendito Verano” no se queda estático en el lado musical.
“El verano es mi momento favorito del año. Yo lo relaciono obviamente con el mar, con el atardecer, con mucha brisa”, señaló. “Y yo me hice la pregunta como si existiera el verano en el cielo y pudieses hacer una fiesta en el cielo, ¿cómo no se vería eso?”.
Parte de lo que imaginó fueron ángeles tocando trompetas, pero esto también la llevó a incluir afrobeat, que la conecta con raíces ancestrales a través de los tambores. Si creara una imagen sería un atardecer con tonalidades rosadas, naranjas y amarillas.
Uno de sus temas destacados es “Luna de miel”, con Beto Montenegro, vocalista de la banda venezolana Rawayana, y el cual creó imaginando un gran amor: “Una canción que la gente se case con ella, o que proponga matrimonio, que se enamoren o que se perdonen”, señaló. Algunas de sus referencias para este tema eran “Somewhere Over the Rainbow” y Santo Domingo en Dominicana. Sus visuales fueron grabados en Italia en compañía de Montenegro.
"Alelujah" es otro de los temas que integran el álbum; en este caso el tema es para encontrar paz con uno mismo. Rose comenzó a escribirla hace unos tres años. La dejó por un tiempo y la retomó cuando encontró el momento adecuado.
“Es como si fuera mi conciencia hablando del amor. Como que siento que es una canción muy elevada en ese aspecto, hablando del tipo de amor que tú no puedes sentir en alguien más, sino en ti mismo”, dijo.
Rose destacó que su álbum, que también tiene como invitados a Eladio Carrión, Young Miko y Justin Quiles, tiene esa cualidad para ser escuchado en la intimidad, pero también permite dedicar sus canciones a algún ser querido.
“Yo todavía creo en el amor y creo en la humanidad y quiero compartir porque creo en ella”, dijo. “Dios quiere que vivamos, que sintamos sin miedo, que amemos, que seamos amor, que disfrutemos, que la pasamos rico, que volvamos a empezar y que confiemos”.