El aeropuerto internacional Jorge Chávez de Lima enfrenta una creciente controversia. Lima Airport Partners (LAP), su operador, ha sido criticado por la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA) y aerolíneas como LATAM Airlines Perú. La razón: la inminente implementación de una nueva tarifa de uso de terminal de transferencia (TUUA) que costará 12,67 dólares para vuelos internacionales y 8 dólares para nacionales.
El Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC) ha intervenido, convocando a una mesa de trabajo con Ositrán y LAP. El objetivo es postergar el cobro de esta tarifa para vuelos domésticos. Sin embargo, esto podría resultar en un impacto financiero significativo para el Tesoro, estimado en 178,5 millones de soles en los próximos 15 años.
Juan Marcos Venegas, Gerente de Planeamiento Financiero en LAP, ha defendido la necesidad de esta tarifa. Explicó que la TUUA de salida se aplica a pasajeros que inician su viaje en Lima, cubriendo 32 servicios aeroportuarios. En contraste, la TUUA de transferencia se aplica a quienes solo utilizan Lima como punto de conexión, accediendo a 25 de esos servicios. Venegas argumenta que el contrato de concesión y la normativa internacional justifican el cobro de esta tarifa, y que cada una debe cubrir los costos específicos de los servicios recibidos.
A pesar de estas explicaciones, LATAM ha anunciado la suspensión de dos rutas internacionales: Lima–Orlando y Lima–La Habana. Venegas ha calificado estas decisiones como una “coerción”, sugiriendo que la cancelación de rutas es una práctica común en la industria, motivada por razones comerciales y no por cambios tarifarios.
Las aerolíneas, según LAP, se oponen a la nueva TUUA de transferencia porque afectaría sus márgenes de ganancia, especialmente en comparación con otros aeropuertos de la región que no aplican tarifas similares. Este conflicto entre LAP y las aerolíneas continúa generando incertidumbre en el sector aéreo peruano, mientras se busca una solución que satisfaga a todas las partes involucradas.