A partir de los 40 años , muchas personas perciben que perder peso se vuelve más difícil y que la energía disminuye en comparación con etapas previas. Esta percepción tiene base científica: el metabolismo , responsable de transformar los alimentos y bebidas en energía, tiende a ralentizarse con la edad.
No obstante, especialistas consultados por GQ señalan que existen hábitos y estrategias que ayudan a mantenerlo activo, lo cual resulta esencial para la salud, el control del peso y la calidad de vida en la madurez.
La Clínica Mayo define el metabolismo como el conjunto de procesos químicos que ocurren en las células y permiten respirar, moverse, sanar y llevar a cabo funciones vitales. Estos procesos, que sostienen el equilibrio interno conocido como homeostasis, son esencial