En los inviernos más fríos de Finlandia, donde las temperaturas pueden bajar hasta –20?°C , los hogares han encontrado un método sorprendentemente simple y económico para mantenerse cálidos. Y aunque aquí en Chile nuestros inviernos no son tan extremos, este truco puede ser igual de útil , sobre todo en casas con ventanas antiguas o corrientes de aire.

La clave está en las ventanas, uno de los lugares por donde se escapa gran parte del calor en cualquier casa. La técnica consiste en cubrirlas con una lámina de plástico transparente o plástico de burbujas , generando una especie de cámara de aire que ayuda a conservar el calor en el interior y a mantener el frío afuera.

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