La suspensión de China, que es el mayor comprador de petróleo ruso, representa un golpe importante para la economía de Rusia. Entre las compañías chinas que suspenden sus compras están Petrochina, Sinopec, CNOOC y Zhenhua Oil. Por el momento, las empresas no han dado declaraciones sobre su decisión.

China recibe por mar unos 1,4 millones de barriles diarios de crudo ruso, y otros 900.000 barriles por oleoducto. Hasta ahora, Rosneft y Lukoil vendían la mayor parte de su petróleo a través de intermediarios para evitar sanciones internacionales.

India, el segundo mayor comprador de petróleo ruso, también planea reducir sus compras para cumplir con las normas impuestas por Estados Unidos. Se espera que ambos países busquen combustible en otras regiones, como Medio Oriente, África y América L

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