El plantel de Lanús sufrió una agresión en Santiago cuando su micro fue apedreado por simpatizantes de la Universidad de Chile, pese a la sanción que impedía la presencia de público en la semifinal de ida de la Copa Sudamericana.

El episodio encendió la tensión antes del partido y volvió a exponer los problemas de seguridad en el fútbol sudamericano.

El hecho ocurrió mientras el equipo argentino se dirigía al estadio para disputar el primer encuentro de la serie.

A pocas cuadras del acceso, el micro recibió piedrazos y botellazos que provocaron daños en los vidrios y generaron momentos de miedo entre los jugadores y el cuerpo técnico.

Los efectivos policiales intervinieron para dispersar a los agresores, aunque no se registraron heridos.

Eduardo Salvio expresó su enojo en redes social

See Full Page