Jannik Sinner es el indiscutible hombre a batir en pista cubierta.

El italiano escaló este sábado hasta la final del Erste Bank Open , donde pretende recuperar el trono dos temporadas después. Totalmente ajustado a las condiciones del ATP 500 austriaco, el No. 2 del PIF ATP Rankings derrotó a Alex de Miñaur 6-3, 6-4 para subrayar un mensaje evidente ante el vestuario: en cualquier torneo indoor, en este preciso momento, la vitola de principal favorito descansa sobre sus hombros.

“Llegué bastante tarde al torneo, he intentado aprovechar al máximo cada día y me siento feliz por estar en la final”, dijo Sinner. “No ha sido sencillo llegar a la final en este torneo, así que estoy muy satisfecho”.

El primer cabeza de serie completó uno de sus más clásicos ejercicios de frialdad, amplian

See Full Page