Bruno Fernando finalmente ha puesto punto final a su etapa en el Real Madrid. El jugador que llegó como relevo de Tavares se marcha por la puerta de atrás del equipo ahora dirigido por Scariolo. Ahora las órdenes las seguirá de un viejo conocido en el mundo del baloncesto: Zeljko Obradovic. Su salida se aceleró en las últimas semanas, cuando la situación del pívot angoleño (27 años) en el conjunto blanco se volvió insostenible. Nunca terminó de encajar: llegó avanzada la temporada pasada como suplente de Tavares y dejó muy malas sensaciones por problemas de concentración defensiva y dificultades para adaptarse a una función secundaria.

El punto de inflexión llegó cuando no viajó a Belgrado para el encuentro frente a Maccabi. La situación ya venía cargada desde el partido en la ACB ante el

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