El Gobierno asume que la de este martes no será una comparecencia fácil para el presidente del Gobierno, en un formato que no es el habitual pregunta, respuesta y sobre asuntos a los que suele dedicar poco tiempo en las sesiones de control, como son los casos de corrupción que salpican a su Ejecutivo o la investigación sobre la actividad profesional de su mujer.
Los los grupos tienen 50 minutos para pedirle explicaciones y Sánchez está obligado a decir la verdad, también a ceñirse a los asuntos para los que ha sido convocado, todo controlado por un senador del Partido Popular.
La Moncloa se ha preparado para una comparecencia que dan por hecho va a ser dura y sucia, mientras que los de Feijóo confían en poder acorralar al presidente y demostrar que estaba al tanto de lo que hacían Ábalos

Cadena SER

La Sexta España
ElDiario.es
Noticias de España
ElDiario.es Opinión
Star Beacon
The Daily Beast
AlterNet
Providence Journal Sports
The Fashion Spot
CNN Business