Para nadie es un secreto que la situación en Cali está que arde, y no precisamente por una fiesta en la 66 ni por un gol agónico en Palmaseca, sino por la decisión sobre el futuro de Alberto Gamero , que dejó a más de uno mascando cable y con cara de pocos amigos.

Porque aunque el semestre del Deportivo Cali fue más amargo que café sin azúcar, el grupo inversor IDC Network , los nuevos dueños del aviso, como se dice coloquialmente, decidieron que el técnico samario sigue firme, por lo menos hasta que se le acabe el contrato, por lo que la hinchada quedó con ese sinsabor a derrota que ya es costumbre, casi que tradición desde hace rato.

Y es que el semestre terminó con un baldado de agua fría para el hincha azucarero: cuatro derrotas al hilo , caída en casa ante Alianza , qu

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