En seguimiento a los trabajos interinstitucionales para salvaguardar el patrimonio arquitectónico de la capital mexiquense, elementos de Protección Civil y Bomberos municipal, junto con personal del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) sostuvieron una reunión para analizar la situación estructural del inmueble ubicado entre las calles Instituto Literario y Nicolás Bravo, catalogado como monumento histórico.

Durante el encuentro, se expusieron los antecedentes del edificio, el cual hasta 2014 se encontraba en buen estado de conservación, no obstante, la falta de mantenimiento y el abandono por parte de los propietarios provocaron un deterioro progresivo que derivó en el colapso parcial de su cubierta y entrepiso en el año 2024.

Los arquitectos del INAH informaron que desde

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