Ante la falta de vigilancia o sistemas de monitoreo, las paradas del transporte público habilitadas en el Distribuidor Vial El Sarape poco a poco van siendo dañadas por los mismos ciudadanos con acciones como robo de cable, conectores y grafitti, esto hace que la imagen de estos parabuses se deteriore.

Además, la infraestructura construida por el municipio expresamente para comodidad de los usuarios del transporte, brinda poca visibilidad al acercarse el transporte por lo que la mayoría de los usuarios prefieren permanecer parados en la estación a pie de banqueta, que utilizar el paradero.

Estas dos casetas construidas para el resguardo de los pasajeros todavía no cumplen el año y ya lucen huellas de vandalismo y maltrato en sus paredes, cristales y conexiones.

En un recorrido por este

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