La Inteligencia Artificial (IA) está llamada a causar una gran revolución a nivel mundial y a traer consigo nuevas eras en sectores que van desde lo económico hasta lo sanitario o lo social. La irrupción de esta herramienta, que crece y avanza a un ritmo frenético, también ha traído consigo grandes problemas que, hasta la fecha, eran inimaginables. Hace dos décadas, por ejemplo, pensar en lo que se podía hacer con los datos que están en el mundo digital quizá no era una preocupación. Ahora, tras años de digitalización, esta cantidad de datos sobrepasa cifras desproporcionadas, y pensar en dónde almacenarlos, cómo manejarlos o compartirlos sí se antoja como algo preocupante.

La evolución de la tecnología y la importancia de todos los datos que se almacenan en la nube han dado pie a l

See Full Page