Desde ahora, si usted quiere una mascota, asegúrese de que es ilegal y ha entrado en España en una patera.

Cómo negocio que añadir al tráfico de personas, pueden añadir el de animales. Así es más seguro conservarla, y puede que hasta le salga el veterinario gratis y le proporcionen su comida, como a todo el que entra ilegalmente, que tiene garantizada la sanidad, el sustento y el alojamiento.

No se le ocurra comprar un lorito, ni una tortuga, porque con eso del “bienestar” animal, se lo confiscarán y lo repatriarán a la selva o el país exótico de origen, sin tener en cuenta que el animalito ha vivido en cautividad siempre.

El animalismo es como el indigenismo, un cuento lleno de fantasías buenistas que rehúye de la realidad como del agua hirviendo.

Un cuento dónde los animales tienen p

See Full Page