Madrid, 10 nov (EFE).- Por primera vez desde que cogió las riendas del Real Madrid, Xabi Alonso enlaza dos resultados negativos. Sin pegada y dando un paso atrás en el juego. Su equipo no se levantó en Vallecas de lo ocurrido en Anfield y se adentra en su primer bache como técnico madridista. Ante dos semanas de parón, en un crecimiento progresivo de la crítica pese al liderato liguero, pidió “mesura”.

Lo vivió como jugador y lo sufrirá como técnico. Xabi Alonso conoce a la perfección lo que conlleva enlazar dos partidos malos sin uno cercano para resarcirse. El parón de noviembre servirá para rearmarse tras el paso atrás dado después del refuerzo de vencer un clásico. Los malos síntomas de Anfield, donde Thibaut Courtois evitó una goleada, se confirmaron en Vallecas, donde el Real Madrid

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