Frente a los luditas de nuevo cuño, que aborrecen de las maravillas de la técnica pero no pueden pasar sin su cepillo de dientes eléctrico, desde aquí celebro los prodigios como la inteligencia artificial et al., que voy descubriendo sin olvidar que una sociedad tecnodesarrollada no es más sabia ni humana. Conviene la sospecha: cuando estas cosas –las redes sociales, la IA…– son gratis, cabe preguntarse si una es clienta o trabajadora, autoexplotada y sin nómina, de las mismas. Cierto es que este contexto es inédito en la Historia, que tiene efectos nocivos (pérdida de memoria y atención, extimidad, relaciones más gaseosas incluso que líquidas…) y acarrea una mutación de corte antropológico. Pero que no vengan los de la cultura del esfuerzo –que curiosamente no dan palo al agua– a decirnos
¿En qué piensas?
Málaga Hoy4 hrs ago
75


AlterNet
CNN
Raw Story
Delaware Sports
Iron Mountain Daily Life
@MSNBC Video
The List