Imagina una ciudad donde los edificios, puentes y banquetas limpian el aire como lo haría un bosque. Esa visión dejó de ser una utopía gracias a una investigación conjunta entre Cemex y el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (Tec de Monterrey), que comprobó científicamente que las estructuras de concreto pueden absorber dióxido de carbono (CO₂) de la atmósfera, de forma similar a los árboles.
El hallazgo, publicado en la revista International Cement Review , detalla el proceso de recarbonatación: un mecanismo natural que permite al concreto capturar CO₂ a través de sus poros y fisuras. Los resultados muestran una capacidad notable de absorción en periodos cortos, lo que posiciona esta tecnología como una herramienta prometedora para mitigar emisiones en entornos

La Crónica de Hoy

El Sol de San Luis丨México Justicia
LancasterOnline Mundo
Raw Story
CBS19 News Crime
Vogue
Rolling Stone