El presidente argentino Javier Milei no asistirá a la cumbre del G20 que se llevará a cabo el 22 y 23 de este mes en Johannesburgo, Sudáfrica. En su lugar, enviará al canciller Pablo Quirno y al sherpa Federico Pinedo, quienes representarán al país en este importante foro internacional. Esta decisión se produce tras el anuncio del presidente estadounidense Donald Trump, quien también ha decidido no enviar a ningún representante a la cumbre, en protesta por lo que él considera violaciones a los derechos humanos en Sudáfrica.

Trump ha expresado en su red social Truth Social que "es una vergüenza total que la cumbre del G20 se celebre en Sudáfrica" y ha denunciado que los afrikáners, descendientes de colonos europeos, están siendo perseguidos y sus tierras confiscadas. Esta postura ha influido en la decisión de Milei, quien ha mostrado un alineamiento con la política de Trump en este contexto.

Fuentes oficiales han confirmado que, aunque Milei no asistirá, Quirno y Pinedo serán los encargados de representar a Argentina en la cumbre. La ausencia de Milei ha generado críticas, ya que se considera que podría ser un desaire hacia el continente africano, especialmente dado que Argentina es uno de los pocos países latinoamericanos que forma parte del G20.

El G20 es un foro crucial que reúne a las principales economías del mundo, representando el 85% del PIB global y más del 75% del comercio internacional. La participación de Argentina en este foro es vista como una oportunidad para fortalecer sus relaciones comerciales y diplomáticas, especialmente en un momento en que se están negociando acuerdos comerciales con Estados Unidos.

A pesar de su ausencia, el gobierno argentino planea presentar su posición en el G20, aunque ha mantenido diferencias con la agenda del presidente sudafricano Cyril Ramaphosa, que incluye temas como el cambio climático y la desigualdad. La decisión de Milei de no asistir a la cumbre se suma a su tendencia de evitar foros multilaterales, prefiriendo eventos más alineados con su ideología política.

La cumbre del G20 en Sudáfrica se presenta como un escenario clave para abordar crisis globales, y la falta de representación argentina podría tener repercusiones en la percepción del país en el ámbito internacional. La situación se complica aún más por la relación entre Milei y Trump, que parece influir en la política exterior argentina en este momento crítico.