El 23 de agosto de 1945, con la película mexicana ‘Tuya, en cuerpo y alma’, fue inaugurado el Teatro Libertador, de propiedad del ya desaparecido empresario Saúl Díaz. Siga las noticias de Vanguardia en Google Discover

Este registro gráfico, captado a finales de los años 70, muestra la antigua fachada del Teatro Libertador. Hoy, en ese sitio, funcionan talleres de motos, ventas de repuestos y artículos eléctricos. (Archivo / VANGUARDIA)

Publicado por: Euclides Kilô Ardila

Por los lados de la carrera 15, entre las calles 23 y 24, cerca de la actual rotonda de la Quebradaseca, alguna vez se proyectó un corazón de película. Era el Teatro Libertador, aquel templo del cine y de espectáculos que, desde mediados de los años 40, llenó de aplausos y sueños las tardes bumanguesas.

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