Escuchaba hace unos días a un importante banquero (entre comillas), a la vez que en mi cabeza oía una voz en off (en paréntesis), con estos argumentos: “Los bancos son decisivos para el buen funcionamiento de la economía” (una economía muy bancarizada como la nuestra, un lastre del pasado frente a las economías modernas, más dependientes del mercado de valores). “A los bancos, pues, les tiene que ir bien a escala local”, (de lo contrario, por pequeños que sean, pueden generar una crisis sistémica que todavía sería peor para los contribuyentes, ya que se tendrían que rescatar). “Y por tanto, tienen que ser muy rentables”, (ni que sea al coste de retribuir con intereses reales negativos a los ahorradores), pensaba yo. Nada sobre su eficiencia, grado de competitividad, o sobre su incapacidad

See Full Page