La noche del 11 de noviembre y la madrugada del 12 de noviembre, se dio una tormenta solar de nivel G4, con una velocidad inicial de unos mil 500 kilómetros por segundo, siendo esta la tormenta más masiva y “agresiva” del año.

Esto causó que, en el tiempo que se dio, en varias zonas del planeta se dieran apagones, fallas en los sistemas de navegación y fuera posible ver auroras boreales en lugares donde nunca se ven.

Este suceso se logró ver desde el espacio gracias a un potente telescopio de la Agencia Espacial Europea (ESA), la cuál monitorea hasta el momento el sol para conocer más sobre este potente evento de clima espacial.

En el video, se puede ver como varias llamaradas de diferentes tamaños, salen del centro del Sol, dejando verse estelas y brillos, lo cuál hace que los expertos

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