Por Deilin Ochoa
A tan solo 36 kilómetros al norte de Mérida, la Reserva Ecológica El Corchito ofrece un respiro verde en medio del intenso desarrollo turístico del puerto de Progreso. Este pequeño santuario natural, gestionado por el Gobierno del Estado de Yucatán, se ha convertido en una de las escapadas favoritas para quienes buscan contacto directo con la naturaleza sin alejarse demasiado de la capital.
Rodeada por manglares y canales de agua, la reserva es accesible únicamente por lancha, lo que añade un toque de aventura al recorrido. Al llegar, el visitante encuentra senderos sombreados, fauna local, como mapaches, coatíes y aves, además de varios cuerpos de agua cristalina: los cenotes, venados y pájaros, además de dos ojos de agua poco profundos ideales para familias con

SOL YUCATÁN

Salon
The Daily Beast
Raw Story