El interés de Nina Rubín por el arte del tatuaje ha tomado un giro inesperado en su vida, al punto de convertir a sus propios padres, Andrea Legarreta y Erik Rubín , en los primeros lienzos de su incipiente carrera como tatuadora.
La joven, que se prepara para su participación en la telenovela Mi verdad oculta , compartió con los medios que ha encontrado en los tatuajes una pasión que va más allá de lucirlos: ahora busca perfeccionar la técnica para ejercerla profesionalmente.
Durante la presentación de su nuevo proyecto televisivo, Nina Rubín , de dieciocho años, relató que el respaldo de su familia ha sido fundamental en este proceso. “Tatué a mi papá y a mi mamá y a algunas personas de mi familia, no es un negocio porque se necesitan todas las licencias”, explicó la actriz,

Infobae México

People en Español
El Diario NY Entretenimiento
Vida Latina
Washington Hispanic
E Online