Luego de un diagnóstico de cáncer, es primordial iniciar con el tratamiento oncológico lo antes posible; se vienen a nuestra mente términos como “cirugía, quimioterapia, radioterapia”, ¿pero es realmente lo único que compone el tratamiento integral para un acompañamiento óptimo? Es necesario llevar un tratamiento que atienda no solo la parte del tratamiento médico, sino también la parte emocional, psicológica y física; y es ahí donde el ejercicio físico logra representar una herramienta inigualable para ser complemento del tratamiento convencional.

Está comprobado científicamente, que la práctica regular de ejercicio físico incrementa la síntesis de neurotransmisores que nos ayudan a sentirnos mejor, a tener más energía y motivación; aunado a ello, el ambiente en el cual se desarrollan la

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