En la trajín y el caminar se dan sucesos susceptibles de convertirse en imperativos, obligaciones o deberes morales y desde luego, traducidos en motores, inductores, aceleradores y motivadores, llegando hasta el alma, a efecto de invocar seres tan especiales y únicos de una u otra manera influyendo en el devenir de nuestra conducta, Por estas calendas, aparecen las páginas de los periódicos y de las instituciones a las cuales les compete, la evocación de aquellas personas sacrificadas en un holocausto de siempre recordar en aras de no volverse a repetir y de tenerse en cuenta como un camino de inmolación de quienes honraron la Patria y las Corporaciones, luchadoras, audaces y finalmente pagando con sus existencias el servicio prestado. En calidad de ciudadanos y gentes de bien, nos cabe

See Full Page