El SAS ha enviado un requerimiento formal a la Asociación de Mujeres con Cáncer de Mama de Sevilla (Amama) para que en el plazo de 10 días le entregue los datos de las mujeres que pudieran estar afectadas por errores en el cribado del cáncer. Las relaciones entre ambas instituciones ha empeorado más allá de lo razonable.

La presidenta de Amama, Ángela Clavero, acusó al Gobierno andaluz de practicar "violencia institucional" contra las mujeres, lo que es una acusación tan grave como poco fundamentada. Sin duda, la sobreexposición mediática está perjudicando a la credibilidad de esta portavoz.

No obstante, el ultimátum que el SAS le ha dado parte de una lectura equivocada de la ley de Salud Pública, que su responsable, Valle García, entiende como si se tratase de una ley de excepción.

See Full Page