La Coral Infantil Integrada de Guayana celebra su 29 aniversario, un hito que resalta su impacto en la comunidad a través de la música. Fundada en noviembre de 1996 por Larrys Salinas, esta coral ha evolucionado de un simple proyecto artístico a un movimiento de integración y amor al prójimo. Su legado perdura, guiado por la visión humanista de Salinas, quien creía firmemente que la música puede ser un refugio emocional y un puente hacia un futuro más solidario.

Durante casi tres décadas, la coral ha demostrado que el canto no solo afina voces, sino que también une corazones y construye comunidad. Para los niños, jóvenes y familias involucradas, la coral representa más que un espacio de ensayo; es una familia extendida que ofrece apoyo y un sentido de pertenencia. Al ingresar un niño, su hogar entero se suma a actividades y encuentros, creando un tejido humano que sostiene y acompaña.

La Coral Infantil Integrada de Guayana se distingue por su capacidad de romper barreras. Jóvenes con y sin necesidades especiales cantan juntos, enviando un mensaje claro de que la integración es posible y transformadora. En cada presentación, la coral reafirma que la belleza surge cuando se canta desde la empatía y la igualdad. Además del canto, el proyecto incluye actividades deportivas y jornadas de servicio social, promoviendo una formación humana basada en la sensibilidad y el respeto.

El sueño de Larrys Salinas ha trascendido más allá de Guayana. Actualmente, la coral cuenta con núcleos activos en Margarita, Valencia y Maracaibo. Recientemente, su mensaje de amor y unidad llegó a la comunidad indígena de Kavanayén, donde sus canciones se interpretan también en pemón, marcando un hito cultural y social.

Este aniversario es especialmente significativo, ya que se dedica a la memoria de Norka Salinas, hermana de Larrys, quien apoyó el proyecto desde sus inicios. A través de la Fundación Larrys Salinas, Norka brindó ayuda a personas en situación vulnerable, llevando alimento y esperanza a quienes más lo necesitaban. Su legado, al igual que el de Larrys, vive en cada nota y en cada niño que encuentra un espacio seguro para crecer.

La Coral Infantil Integrada de Guayana reafirma su misión de servir, integrar y transformar, honrando a quienes han sembrado este camino con amor y convicción en el poder de la música. Su canto sigue resonando, prometiendo un futuro lleno de armonía y unidad.