Lo que comenzó como un regreso tranquilo después del puente del 20 de Noviembre terminó convirtiéndose en un auténtico caos para cientos de automovilistas que quedaron atorados durante más de una hora —y algunos hasta dos— en la caseta de cobro de Villa Ahumada, donde solo dos carriles estaban abiertos pese a la enorme cantidad de vehículos que se dirigían al sur del estado. Las filas avanzaban a cuentagotas y la molestia no tardó en estallar entre los conductores, que hacían sonar los cláxones en protesta y reclamaban la falta de previsión de las autoridades, pues aseguran que este congestionamiento ocurre cada vez que hay un fin de semana largo.

La desesperación llevó a muchos guiadores a salirse de la carretera y avanzar por la terracería con la intención de llegar más rápido a la case

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