La emoción fue protagonista en el estreno de La Manada , el nuevo programa conducido por Mario Irivarren , quien no pudo contener el llanto al recordar a Nieve , su perrita fallecida y parte fundamental de su vida construida con Onelia Molina. La transmisión, que debía marcar un inicio festivo y lleno de ilusión, se vio atravesada por el duelo personal del conductor, quien compartió con la audiencia la dificultad de celebrar mientras procesa una de las pérdidas más duras de su vida.

En palabras sinceras al aire, Mario Irivarren expresó: “Yo quería un poco desahogar esto y poder continuar, porque ya toca continuar. Ya Nieve no va a volver, pero siempre la recordaremos. Le agradezco igual a Nieve porque me hizo conocer un amor tan bonito, tan puro y tan sincero. Me hizo

See Full Page