Perder objetos con frecuencia (las llaves, el celular, los anteojos, la billetera) parece un hábito cotidiano o un síntoma de distracción, pero para el Feng Shui es una señal más profunda: indica que la energía del hogar está en desorden y que el Chi (energía vital que recorre los espacios) está bloqueado o fragmentado.
Cuando la casa no tiene un flujo armónico, lo físico empieza a reflejar el caos interno y emocional, y los objetos comienzan a “esconderse” como consecuencia de un ambiente saturado, confuso o energéticamente sobrecargado, de acuerdo al Feng Shui .
Un hogar donde las cosas desaparecen constantemente suele ser un hogar donde la mente también está dispersa y agotada. En Feng Shui , los espacios reflejan estados emocionales: si hay acumulación excesiva, rincones cong

MINUTO NEUQUÉN

Raw Story