El empresario de la aviación Sergio Mastropietro, investigado como un engranaje clave del presunto circuito financiero de sobreprecios y sobornos en la Agencia Nacional de Discapacidad (Andis), logró no entregar su teléfono en un procedimiento judicial porque la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) y la Dirección de Migraciones demoraron hacerle la requisa que había ordenado el juez Sebastián Casanello.

De acuerdo con la información a la que accedió La Nación de fuentes conocedoras del hecho, agentes de los dos organismos debían secuestrarle sus dispositivos cuando Mastropietro llegara de Estados Unidos a Aeroparque, pero eso nunca sucedió.

Según informaron fuentes que conocieron los movimientos de Mastropietro, el empresario viajó el sábado 15 de Miami a Buenos Aires en un avión pri

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