Jugar solía ser sencillo: comprar un disco, instalarlo y jugar. Ahora, cada sesión puede traer una nueva oferta, desde skins cosméticos hasta battle passes y DLCs de tiempo limitado. Lo que antes se sentía como entretenimiento puede convertirse fácilmente en un flujo continuo de microcompras.

Para muchos jugadores, el desafío no es solo decidir qué comprar, sino llevar un registro de lo que ya han pagado.

Los costos ocultos de la conveniencia digital

Cuando los métodos de pago se almacenan en consolas o tiendas digitales, aprobar pequeños cargos se vuelve muy fácil. En el transcurso de semanas o meses, estos cargos se acumulan hasta más de lo esperado.

Por qué es difícil notar el gasto

La mayoría de los jugadores no registra sus transacciones dentro del juego con el mismo cuidado que

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