La Autoridad de Transporte Urbano para Lima y Callao (ATU) ha revelado que el bus turístico en el que falleció un hincha del Palmeiras no contaba con la autorización necesaria para operar. El trágico incidente ocurrió la noche del viernes 28 de noviembre, durante las celebraciones previas a la final de la Copa Libertadores 2025, en la Costa Verde, cerca de la playa Los Yuyos, en Barranco. El hincha brasileño, identificado como Caue Brunelli Dezotti, de 38 años, cayó desde el segundo piso de un mirabús mientras festejaba con otros aficionados. Testigos informaron que Brunelli había estado ingiriendo alcohol antes del accidente. El fatal suceso se produjo cuando el vehículo descapotable circulaba a la altura del puente Bajada de Baños. Según los informes, el hincha estaba saltando de alegría cuando su cabeza impactó contra la estructura del puente, lo que le hizo perder el equilibrio y caer a la vía de la Costa Verde. Sus acompañantes descendieron rápidamente del vehículo para brindarle ayuda y esperar la llegada de las autoridades. Brunelli fue trasladado a la clínica Maison de Santé, donde se confirmó su fallecimiento debido a un trauma craneoencefálico severo. La ATU ha indicado que el bus, con placa F4T-780, pertenece a la empresa Solbus Transporte Turístico E.I.R.L., que tiene permiso para operar, pero la unidad específica carecía de autorización al momento del accidente. Por esta infracción, la empresa enfrentará una multa de 21,400 soles. Además, la ATU ha señalado que el conductor, aunque poseía un brevete, no estaba habilitado para operar en rutas turísticas. Esto resultará en una multa adicional de 2,675 soles y la inhabilitación permanente del vehículo para prestar servicios turísticos. La ATU ha reiterado su compromiso de mantener controles y filtros regulatorios para garantizar la seguridad en el transporte de pasajeros. El club Palmeiras también ha expresado sus condolencias a la familia y amigos de Brunelli a través de sus redes sociales, lamentando la pérdida de un aficionado. La ciudad de Lima se prepara para acoger la final de la Copa Libertadores entre Flamengo y Palmeiras, programada para el sábado 29 de noviembre, en el Estadio Monumental, donde se espera un gran aforo y un fuerte despliegue de seguridad.