El presidente Gustavo Petro volvió a generar controversia con sus reacciones a comentarios hechos por Tomás Uribe Moreno, hijo del expresidente Álvaro Uribe Vélez. Este episodio dejó al descubierto no solo la polarización que sigue dominando la política colombiana, sino la incoherencia en la postura del mandatario, que se vio envuelto en una disputa que no le correspondía.

El desencadenante de esta polémica fue una serie de críticas de Tomás Uribe sobre los masivos despidos de periodistas en W Radio y Caracol Radio. En sus declaraciones, el empresario lamentó la salida de periodistas como Paula Bolívar —que destapó la red de corrupción en la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (Ungrd)—, pero no dudó en atacar directamente al periodista Daniel Coronell, uno de los m

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